Hola, hola, hola, que
tal, como estan mis seres más queridos y significativos, yo mme estoy
portanndo muy bien ¿Y ustedes? ¿Como se estan portando ultimmamente? Vamos a
ver, dijo un ciego y vamos a oir le contestó un sordo, bailando zamba repicó
un mocho y ustedes ¿que me van a decir?
¿Están pendientes de los
que les dije! De mis creencias, bueno vamos a seguir, no sin antes recordarte
que el amor está por encima de todo, Sin embargo, hay también creencias positivas o facilitantes,
que son esas que me empujan, que me llevan a la
acción, cuando tu me das besitos (pero no en la boca, porque entre
otras, me trasmites muchisimos germenes, enfermedades, infecciones, etc),
cuando tu me miras con esos ojitos de ternura, de amor, de comprensión,
cuando me haces cariñitos, cuando me dices palabras dulces y estimulantes,
¡tú si puedes!, que bien lo hicistes, cada día lo haces mejor, tu eres muy
inteligente, tu eres un niño sano, saludable, tu eres muy fuerte, mira como
me ayudas con esta bolsa de mercado, tu puedes con tu bolso del colegio, tu
siempre estás feliz, tu siempre estás contento, a ti te gustan todas las
comidas, tu aprendes muy rápido, tu eres fuerte, tu eres amoroso, tu eres
cariñoso, tu eres muy inteligente, tu eres muy simpático, tu siempre me
ayudas, tu aprendes con mucha facilidad, tu eres exitoso, que yo soy bonito,
que yo soy lindo, que yo soy dulce, que yo soy ordenado y muchas cositas más
que tu sabes y puedes decirmelas, anda, tu si puedes, no tengas miedo a
fallar.
Las creencias son los mapas mentales
que tenemos de las distintas situaciones, que me dan continuidad y
estabilidad, bueno, las creencias positivas, las creencias facilitantes,
cuándo yo, tu hijito lindo, comparto con alguien alguna creencia me siento
más cerca de esa persona, mejor comprendido y soy capaz de entablar mejores
relaciones con aquellas personas que tenemos creencias en común, es decir, si
tu me tratas bien, lo que se dice bien, yo voy a entablar relaciones
positivas con todos aquellos amiguitos y amiguitas que me traten bien, que
sean estudiosos como yo, que sean ordenaditos como yo, que sean cariñosos
como yo, que quieran mucho a sus padres como yo, que sean buenos ciudadanos
como yo, que sean educados como yo.
Bueno mis seres queridos
y amados, si tu acostumbrabas a decirme cosas no tan buenas, llegó el momento
de cambiar, porque cuando cambiamos una creencia negativa, por una creencia
positiva, estamos inyectando nuevas posibilidades a nuestras actuaciones y
por lo tanto, los resultados que vas a obtener, no se haran esperar tanto,
esos resultados, tarde o temprano irán cambiando, eso de acuerdo a que tan
arraigada tenía esa creencia negativa en mi estructura psicológica.
Las creencias de tu
hijito lindo, se me van formando a medida que yo voy entrando en contacto con
el mundo externo, lo cual tiene mucho que ver con las expectativas que tienen
los demás acerca de mi. Me despido de ti con un guiño de mi ojito y un beso
grandote, también me provoca hacerte cosquillas, pero a veces te veo tan
serio/a que no me atrevo, anda, rompe tú ese hielo y hazme cosquillitas para
saber que yo también te las puedo hacer, anda bota esa tuerca que te estás
mascando, ¡que lindo/a te ves!; ¡que emoción! Esa sonrrisa tuya es preciosa,
es un regalo de dios. Te quiero y te sigo contando de mis creencias.
Pendiente, ya sabes, muy pendiente.
|
martes, 4 de marzo de 2014
Creencias positivas
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario